¡El verano ha llegado y es el momento perfecto para crear nuevos recuerdos inolvidables en familia! Aprovecha esta temporada para fortalecer los lazos familiares y fomentar el crecimiento emocional de todos los miembros. Comparto a continuación 9 claves para vivir un verano en calma:

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Claves para disfrutar del verano en familia

1. Ajusta tus expectativas

El verano puede evocar la idea de días llenos de aventuras y diversión constante, pero es vital recordar que puede haber altos y bajos a lo largo de los días. Ajustar nuestras expectativas y abrazar la espontaneidad nos permitirá disfrutar de los momentos diarios sin sentirnos frustrados por las expectativas poco realistas.

2. Involucra a los niños en la planificación

Permitir que los niños participen en la planificación de actividades y excursiones puede aumentar su entusiasmo y sentido de pertenencia. Anima a tus hijos a proponer ideas y propuestas de planes. Podéis hacer un listado con las actividades que os apetece hacer, valorar si son factibles y comprometeros a realizarlas si así lo decidís. No tienen porque ser planes excesivamente elaborados ni costosos. Ver salir el sol, tomar un helado después de cenar, jugar a algún juego de mesa después de comer, recoger flores para hacer alguna actividad en casa… ¡Seguro que se os ocurren ideas geniales!

3. Tiempo al aire libre y conexión con la naturaleza

Organiza actividades al aire libre, como picnics, excursiones, días de playa o salidas a la naturaleza para fomentar la conexión con el entorno natural y disfrutar de momentos de calma y relajación.

4. Aprovecha los momentos cotidianos

No es necesario planificar grandes actividades todos los días. Aprovecha también los momentos cotidianos para conectar con tus hijos: cocinad juntos, leed cuentos antes de dormir, jugad en el jardín o simplemente disfrutad de una tarde de juegos de mesa en familia.

5. Resolución de conflictos con empatía

Durante el verano pasamos más tiempo juntos y es normal que surjan desafíos. Aborda los conflictos con empatía y enfócate en la solución, en lugar de buscar culpables. Utiliza preguntas abiertas para ayudar a tus hijos a reflexionar sobre sus acciones y encontrar soluciones positivas.

6. Flexibilidad y adaptabilidad

El verano puede traer consigo cambios de rutina y planes imprevistos. Practicar la flexibilidad y adaptabilidad ayuda a que todos los miembros de la familia se sientan más cómodos frente a nuevas situaciones y posibles contratiempos.

7. Practicar la gratitud y el agradecimiento

Fomentar la gratitud en la familia ayuda a fortalecer lazos y promover una actitud positiva. Tómate un momento cada día para expresar agradecimiento por las pequeñas cosas y enséñales a tus hijos a reconocer las bendiciones de la vida. Un buen momento para hacerlo puede ser al acostarse, invitándoles a pensar en 3 cosas por las que se sienten agradecidos en el día de hoy. Puedes compartir tú también con ellos tus agradecimientos.

8. Tiempo para el autocuidado

Recuerda que el autocuidado es esencial para todos los miembros de la familia, ¡también para las madres y padres! Es necesario encontrar momentos para descansar y recargar energías, lo que te permitirá estar más presente y disponible para tus hijos.

9. Disfruta del proceso

Finalmente, disfruta del proceso y huye de la perfección. El verano es una oportunidad para crear recuerdos especiales y vínculos significativos. Permítete disfrutar del momento presente con tus hijos y celebra cada logro, pequeño o grande, durante esta temporada llena de aventuras.